REALIZAREMOS ENVÍOS MIENTRAS HAYA FRUTA APTA DISPONIBLE PARA SU RECOLECCIÓN

¿QUÉ TIENE DE ESPECIAL ESTA FRUTA?

• A diferencia de los cítricos, la ciruela tiene una oportunidad de recolecta muy corta y sobre todo muy puntual, cuando llega el momento HAY QUE RECOGERLA. No se puede mantener en el árbol durante meses.

• Como la fruta no madura toda al mismo tiempo, lo que hacemos es escalonar su recolecta en función de su punto de maduración, por lo que dicha recolecta suele durar una o dos semanas, dependiendo de los factores ambientales que aceleran o retrasan su maduración.

•  Si se recoge demasiado madura llega realmente rápido a un punto en el que es inviable su comercialización debido a su blandura, lo que provoca que se dañe durante la recolecta y/o su transporte.

• Ese punto exacto antes de que sobremadure en el árbol es bastante impredecible, sabemos por experiencia en qué fecha suele ocurrir, pero depende extremamente de las condiciones ambientales a las que se expone la plantación.

• Por eso es necesario saber de antemano qué cantidad de fruta vamos a necesitar recolectar, de manera que podamos garantizar que llegue a nuestros clientes en perfectas condiciones tras someterse al proceso de transporte, asegurándonos de que hayan alcanzado el punto perfecto de recolección en el árbol.

Como os hemos comentado, las ciruelas se recolectan en un momento previo a su maduración en el árbol, por lo que cuando las recibáis, puede ser que aún no hayan alcanzado todo su sabor. Por eso es importantísimo seguir algunas recomendaciones para que podáis disfrutar de vuestras ciruelas y sacarles el máximo jugo a su sabor.

1. DEBEMOS SACARLAS INMEDIATAMENTE DE LA CAJA EN LA QUE HAN LLEGADO

2. REVISAREMOS SI ALGUNA TRAS EL TRANSPORTE SE HA VISTO AFECTADA O SI YA HA COMEZADO SU MADURACIÓN POST-COSECHA

3. METEREMOS EL MAYOR NÚMERO DE PIEZAS EN EL FRIGORÍFICO, LO QUE NOS PERMITIRÁ AMPLIAR ENORMEMENTE SU DURABILIDAD.

4. NO ES RECOMENDABLE LAVAR LA FRUTA HASTA EL ÚLTIMO MOMENTO ANTES DE COMERLAS, YA QUE LAS CIRUELAS POSEEN UN MECANISMO NATURAL DE PROTECCIÓN EN SU PIEL QUE LAS AYUDA A MANTENER LOS HONGOS A RAYA.

5. DURANTE LA PRIMERA SEMANA, SERÁ CONVENIENTE SACAR LA FRUTA DE LA NEVERA AL MENOS UNAS 24 HORAS ANTES DE CONSUMIRLAS Y SI LAS QUEREMOS COMER FRESQUITAS VOLVER A METERLAS EN LA NEVERA UNAS HORAS ANTES DE CONSUMIRLAS, ASÍ DARÁ TIEMPO A ENFRIAR LA CARNE DEL FRUTO COMPLETAMENTE.

6. SI QUEREMOS ACELERAR EL PROCESO DE MADURACIÓN DE LA FRUTA PODEMOS CONSEGUIRLO A TRAVÉS DE UNA TÉCNICA CONOCIDA COMO MADURACIÓN POR CHOQUE TÉRMICO, QUE CONSISTE EN SOMETER A LA FRUTA A VARIOS CAMBIOS BRUSCOS DE TEMPERATURA FRIO-CALOR REPETIDAMENTE (AL MENOS 2 VECES) LO QUE PROVOCARÁ QUE LA FRUTA MADURE RÁPIDAMENTE AUMENTANDO SUS AZÚCARES Y PONIÉNDOSE MÁS BLANDA Y MÁS AGRADABLE AL PALADAR (Por ejemplo, si queremos madurar 5 o 6 piezas, las sacaremos de la nevera la noche anterior, las volveremos a meter en la nevera por la mañana y al medio día las volvemos a sacar de la nevera. Verás que esa misma noche ya están listas para el consumo).

7. CONFORME PASEN LOS DÍAS ES CONVENIENTE SELECCIONAR DE LA NEVERA AQUELLAS FRUTAS CUYA PIEL ESTÉ TOTALMENTE NEGRA Y MÁS BLANDAS AL TACTO.

Junto con vuestro envío volveremos a mandaros todas estas recomendaciones para que podáis disfrutar plenamente del sabor tan increíble que tienen nuestras ciruelas BLACK SPLENDOR.

EL PRODUCTO ESTARÁ DISPONIBLE MIENTRAS HAYA FRUTA APTA EN LOS ÁRBOLES.

Descripción del Producto:

Ciruela Black Splendor:

Ciruelas de piel oscura, casi negra, cuya carne presenta una coloración rojo intenso, un dulzor realmente increíble y una cantidad de caldo impresionante. Su piel tiene un sabor bastante ácido.

La ciruela Black Splendor, además, presenta otra característica que la hace muy interesante, su durabilidad. Gracias a la dureza de su piel y a los mecanismos naturales que el árbol desarrolla en ésta, la Black Splendor tiene una durabilidad altísima post-cosecha siempre que se la mantenga bien refrigerada, permitiéndonos disfrutar de ella durante muchísimos días sin preocuparnos por que se pueda deteriorar.

A diferencia de los cítricos, la ciruela, como casi todos los frutos de hueso, melocotón, nectarina, etc, sigue madurando e incrementando sus azúcares una vez se ha recolectado del árbol, es decir, tiene la capacidad de aumentar sus azúcares tras ser cosechada.